Parafina es el nombre común de un grupo de hidrocarburos alcanos de fórmula general CnH2n+2,
donde n es el número de átomos de carbono. La
molécula más simple de parafina es el metano,
CH4, un gas a temperatura ambiente; en cambio, los miembros más
pesados de la serie, como el octano C8H18, se
presentan como líquidos. Las formas sólidas de parafina, llamadas cera de parafina, provienen de
las moléculas más pesadas C20 a C40. La parafina fue
identificada por Carl Reichenbach en esta forma, en 1830.
Parafina,
o hidrocarbono de parafina,
es también el nombre técnico de los alcanos en general, aunque en la mayoría de
los casos se refiere específicamente a un alcano lineal o alcano normal — si posee ramificaciones, los isoalcanos también son llamados isoparafinas.
Generalmente se obtiene del petróleo, de los esquistos bituminosos o del carbón. El proceso comienza con una destilación a temperatura
elevada, para obtener aceites pesados, de los que por enfriamiento a 0 °C,
cristaliza la parafina, la cual es separada mediante filtración o centrifugación. El producto se purifica mediante recristalizaciones,
lavados ácidos y alcalinos y decoloración.2 Las refinerías de petróleo normalmente producen parafina. También se puede
obtener mediante el craqueo térmico del petróleo, donde se rompen cadenas de
carbonos y se añade calor 400–650 °C.
CERA
La
cera de parafina se encuentra por lo general como un sólido ceroso, blanco, inodoro, carente de sabor,
con un punto de fusión típico entre 47 °C y 64 °C. Es insoluble en agua, aunque
si es soluble en éter, benceno, y algunos ésteres. La parafina no es afectada
por los reactivos químicos más comunes, pero se quema fácilmente.
La
cera pura de parafina es un muy buen aislante eléctrico. Esto es mejor que la resistividad de la mayoría de los
otros materiales excepto algunos plásticos (por ejemplo el teflón). Es un moderador de neutrones muy efectivo y
fue utilizado por James Chadwick en los experimentos que realizó en 1932 para
identificar al neutrón.
La
cera de parafina (C25H52) es un material excelente para almacenar
calor, que tiene una capacidad
calorífica de
2,14–2,9 J g–1 K–1 y un calor
de fusión de 200–220 J/g.6 Esta característica es aprovechada en la modificación
de placas de material de construcción, como las de cartón yeso; la parafina es vaciada o
inyectada en la placa, donde se derrite durante el día, absorbiendo calor, y se
solidifica después, durante la noche, liberando calor.
La
cera se expande considerablemente cuando se derrite, y ello se utiliza en la
fabricación de termostatos para uso industrial o doméstico y
especialmente en automóviles.7
Para
preparar los moldes para fundir piezas de metal y otros materiales, se usan
"cubiertas de cera para fundición", en las cuales la parafina es
combinada con otros materiales para obtener las propiedades deseadas. En
general no se utiliza para hacer los moldes o modelos originales para
fundición, pues es relativamente frágil a temperatura ambiente y no puede ser
tallada en frío sin que se produzcan fracturas. Las ceras suaves, flexibles
tales como la cera de abejas son preferidas para estos propósitos.
En
aplicaciones industriales, es práctica común modificar las características
cristalinas de la cera de parafina, lo cual se consigue agregando algunas
cadenas laterales a la cadena de carbón de la parafina. La modificación se
realiza generalmente con aditivos, tales como goma
EVA, cera micro cristalina, o
formas de polietileno. Así
resulta una parafina modificada, con una alta viscosidad, una menor estructura
cristalina y propiedades funcionales diferentes.
La
parafina tiene varias otras aplicaciones. Se utiliza para fabricar papel
parafinado para empacar alimentos y otros productos; para fabricar papel
carbón; para impermeabilizar tapas de corcho o plástico, maderas, municiones;
como aislante en conductores eléctricos; para fabricar lápices grasosos, bujías
y múltiples artículos.
COMPRAR
PARAFINA PARA VELAS
La parafina es el principal “ingrediente” que
debemos utilizar si queremos hacer velas caseras.
Como actualmente está muy de moda, es muy fácil encontrar parafina
en diferentes lugares y tiendas físicas, como por ejemplo
droguerías, tiendas de manualidades, cererías, e incluso he leído que se puede
encontrar en herbolarios y tiendas de jardinería un poco grandes que tengan
alguna sección de manualidades o similar.
Se puede comprar en grandes cantidades y no es un producto caro. Además es muy útil
ya que se puede comprar con brillos, de colores, en perlas, en planchas, con
efectos, moldeable e incluso transparente para poner dentro una vela a modo de
farolillo. Si queremos comprar parafina para hacer velas
online, hay muchísimos sitios donde la venden.
Es muy importante seguir las instrucciones de
fundición de la parafina que
vienen indicadas en el envase, ya que, cada una es diferente, y conviene
fijarse para que el resultado sea óptimo.
En la mayoría de estas páginas encontraréis además el resto de los accesorios que se necesitan para crear velas, como por ejemplo moldes, mechas, recipientes, colorantes, aromas y
demás adornos.